Amanece
un nuevo día, tras nuestra primera noche en Israel…
¡Hemos
empezado fuerte! El despertador ha sonado a las 05h45, y la mañana está muy
clara, Hoy íbamos a pasar calorcito, con una temperatura inusual en esta época
del año.
Tras
el desayuno (06h45), el grupo se ha puesto en marcha, y a las 07h30 estábamos
saliendo de nuestro hotel, en dirección al Mar Mediterráneo, donde se encuentra
nuestra primera visita del día: San Juan de Acre. Como es habitual en estos
viajes, comenzamos el día con una reflexión que nos regala el P. Ramón.
Allí
nos encontramos con la Ciudadela de los Cruzados, obra de ingeniería
espectacular, en la que aún hoy se siguen realizando trabajos de rehabilitación
y siguen apareciendo nuevas salas. El Refectorio, o comedor de los caballeros,
es impresionante. Todo el conjunto en sí sobrecoge por su belleza.
No
hemos podido recrearnos mucho en la visita, ya que nuestro programa es denso y
hay muchos lugares por conocer. A la salida, vuelta al bus para dirigirnos a la
ciudad portuaria de Haifa, en el Monte Carmelo que, aunque su nombre evoque a
una montaña en realidad es una cordillera de 25 kilómetros. Aquí, el P. Ramón
nos ha dado extensas explicaciones ya que lo conoce bien, por tener su sede la
Orden Carmelita. Y es que, como él dice, “hoy jugaba en casa”, e iba ataviado
con el hábito de la Orden 😂😂
Primero
hemos visto los jardines Baha’i desde abajo, con el bus, antes de visitar el
Santuario Carmelita donde se encuentra la Gruta de Elías, el profeta. Después,
hemos podido deleitarnos con las vistas de los jardines desde arriba, con una
vista panorámica muy bonita del puerto.
Nuestra
siguiente visita ha sido en Nazaret, donde hemos conocido el recinto y el
interior de la Basílica de la Anunciación. Aquí, según la tradición, se
encuentra la casa de María, donde el Arcángel San Gabriel se le apareció para
anunciarle que iba a ser la Madre de Jesús. Sobre los restos de la casa se
erigió la Basílica, en la que encontramos numerosas Advocaciones de María.
Néstor, nuestro guía, dice que las iglesias tienen cúpula, pero que en este
caso la cúpula es la que tiene debajo la iglesia, porque es una cúpula inmensa.
Junto
a la Basílica se encuentra la iglesia de San José, sobre la casa familiar y la
carpintería donde trabajaba. Los estudiosos dicen que era una familia “con
posibles”, dado que en el interior se encuentra una pileta de purificación, y
no todo el mundo podía permitirse una en casa.
Hemos
almorzado en el restaurante “Olive”, lugar típico de recepción de grupos para
comer, y de allí nos hemos ido a Caná de Galilea, a lo que ha sido uno de los
momentos más emocionantes del día, donde las parejas que lo han deseado han
podido renovar sus promesas de matrimonio en el lugar donde se celebró el
Primer Milagro, en una boda. El Santuario Franciscano está custodiado por una
Comunidad de monjas que atienden a los peregrinos que hasta allí nos acercamos.
Y la colecta de la misa queda como nuestra humilde aportación al sostenimiento
de los Santos Lugares.
Al
salir del Santuario, hemos hecho una pequeña parada en un comercio cristiano
local (los cristianos somos tan sólo el 2% de la población de Israel) para
probar el vino de Caná y poder adquirir recuerdos como rosarios, alguna pequeña
pieza de joyería de carácter religioso, iconos, etc.
Ya
habíamos cumplido el programa del día y, como aún teníamos ganas y el reloj nos
lo permitía, hemos improvisado una visita a Caprice, el lugar donde se trabaja
y comercializa el diamante y demás piedras preciosas y semipreciosas. Israel es
una potencia mundial del diamante, y la Bolsa del Diamante de Tel Aviv es una
de las más importantes del mundo.
En
una visita guiada nos han explicado el proceso de la excavación y extracción,
la selección del tallado para cada pieza, el procedimiento del tallado en sus
múltiples variaciones y su comercialización, que termina invariablemente con el
saludo “MAZAL U’BRACHA” (se lee “Masal u braja”), que significa “Suerte y
bendición”. Hemos visto un video de todo el proceso, y la visita ha acabado en
la sala de exposición y venta, donde hemos podido admirar auténticas
maravillas.
Con
esta visita hemos acabado por hoy, trasladándonos al hotel para cenar y
descansar. Mañana es otro día duro e intenso, en el que acabaremos de recorrer
los puntos más importantes, para los cristianos, de la Galilea. ¡Os lo
seguiremos contando mañana!
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